Los 10 trabajos que sobrevivirán cuando las máquinas reemplacen a los humanos
¿Qué pasará con la humanidad cuando todo el planeta esté automatizado y la inteligencia artificial haga todas las tareas por los humanos? Para algunos, ese panorama está a la vuelta de la esquina, y no pinta nada bien en el sector laboral.
Para Andrés Oppenheimer, autor del libro ¡Sálvese quien pueda! El futuro del trabajo en la era de la automatización, es probable que en las próximas dos décadas, casi la mitad de los empleos serán reemplazados por computadores con inteligencia artificial.
Según el escritor argentino, considerado como uno de los 50 intelectuales más influyentes de Latinoamérica, “la automatización del trabajo nos va a afectar a todos, desde los obreros hasta los profesionales. Y el que no se prepare, se va a quedar afuera”, señaló en entrevista para El Clarín.
Así las cosas, y luego de una ardua investigación que está reflejada en su libro, Andrés Oppenheimer señala que estas serán las 10 profesiones que seguirán existiendo cuando las máquinas reemplacen a los humanos:
1. Los asistentes de salud
Debido al aumento de la expectativa de vida y el envejecimiento de la población mundial, los trabajos que tienen que ver con el cuidado de la salud, tales como consejeros médicos que ayuden a interpretar los diagnósticos de las computadoras, las enfermeras, los psicólogos, los nutricionistas, los masajistas y los entrenadores físicos, serán más importantes.
El autor le da mucho valor a los trabajos relacionados con la gente de edad avanzada, ya que entre 2014 y 2030, el número de personas mayores de 65 años en el mundo aumentará en 300 millones y requerirán ayuda, empatía y calidez humana que, a su consideración, las máquinas tardarán mucho en ofrecer.
2. Los analistas de datos, ingenieros de datos y programadores
Los datos serán el producto más valioso en los próximos años para identificar, entre otros, patrones de comportamiento de las personas, la sociedad y dar respuesta a necesidades o diseñar nuevos productos.
Según Oppenheimer, “quienes se dediquen a su exploración y análisis tendrán trabajo asegurado”.
3. Los policías digitales
Ya que la economía se traslada cada vez más al mundo digital, la empresas necesitarán personas que cuiden esa información de los ataques cibernéticos.
“Así como cualquier empresa tiene un policía en la puerta, cualquier negocio deberá tener un policía digital, o muchos, para que sus datos no sean robados por algún adolescente travieso, un grupo de ciberespionaje profesional ruso, los gobiernos de Corea del Norte o China”, destaca el escritor argentino de 66 años de edad.
4. Los asesores de ventas
Con el crecimiento de las clases medias, el consumo mundial aumentaría a más de 23 trillones de dólares en 2030, según el McKinsey Global Institute. Así las cosas, y a medida que las tiendas físicas paran al comercio electrónico, se necesitarán personas que brinden asesoría sobre cualidades y precios de los productos.
Dice Oppenheimer que los vendedores del futuro cercano “tendrán una mayor preparación académica” y , más que vender un producto, su función será educar a los consumidores. Esto creará relaciones de confianza para ganar la lealtad del cliente a largo plazo.
Además, señala que ” uno de sus principales requisitos laborales será saber sonreír y contagiar el buen humor, algo que los humanos seguirán haciendo mucho mejor que los robots”.
5. Los cuidadores y programadores de robots.
Debido al posible incremento en la venta de robots, el autor considera que éstos necesitarán “ingenieros para aceitarlos, hasta programadores para actualizar su software.
Entre los trabajos técnicos que más se desarrollarán en el futuro, estarán los de “los inspectores y mecánicos del internet de las cosas”,. Esto último hace referencia al sistema que está conectado entre sí, que permitirá por ejemplo que el cartón de la leche le avise a la nevera que nos estamos quedando sin esa bebida.
6. Los profesores y maestros:
Por el aumento en la automatización de empleos, considera Oppenheimer que se necesitarán profesores para educar a la gente en el manejo de los robots y las tareas más sofisticadas.
Por otro lado, y debido a la velocidad del desarrollo tecnológico, lo que se estudió en la universidad hace 10, 20 o 30 años ya será algo prehistórico en la mayoría de trabajos. Así que “tendremos que estudiar de por vida, en periodos intermitentes, para actualizarnos y reinventarnos según los requerimientos del mercado laboral”.
Además, los maestros serán muy importantes para enseñar a los niños a encontrar su vocación, así como para fomentar cualidades como la ética, la empatía, el trabajo en equipo, la persistencia y la tolerancia al fracaso.
7. Los especialistas en energías alternativas
Las consecuencias del cambio climático y una sociedad cada vez más consciente de que debe regular el consumo, serán el escenario ideal para especialistas en energías renovables.
El futuro cercano requerirá más inversión en energías como la solar y la eólica. “Se necesitarán cada vez más científicos especializados en energías renovables, y arquitectos e ingenieros encargados de montar plantas y hacer que las fábricas, los edificios y los vehículos sean más eficientes”.
8. Los artistas, deportistas y creadores de entretenimiento
Ya que la gente trabajará menos horas a la semana, tendrá por ende más tiempo para la demanda de cine, música, arte y literatura.
La automatización del mundo le abrirá un gran campo a las industrias creativas, según Oppenheimer.
9. Los creadores y diseñadores de contenido
A medida que aumenta el comercio en línea, los consumidores necesitarán tomar sus decisiones de acuerdo con lo que se ve en internet.
Por eso, tomarán valor los creadores de contenidos visuales, los escritores de blogs y artículos en redes sociales.
Según Oppenheimer, los sitios de internet de las empresas, deportivas y artistas profesionales, se convertirán en “verdaderos medios de comunicación”. “Eso hará que los portales de internet sean mucho más importantes (…) requerirán creadores de contenidos cada vez más talentosos”.
10. Los consejeros espirituales
La creciente soledad de la población, así como la desagregación de las familias, convertirá en necesidad a las personas que ayudan a orientar el sentido de la vida.
“Los sacerdotes, imanes y rabinos tendrán su trabajo asegurado durante mucho tiempo”, señala el autor de este libro.
El autor le da mucho valor a los trabajos relacionados con la gente de edad avanzada, ya que entre 2014 y 2030, el número de personas mayores de 65 años en el mundo aumentará en 300 millones y requerirán ayuda, empatía y calidez humana que, a su consideración, las máquinas tardarán mucho en ofrecer.
2. Los analistas de datos, ingenieros de datos y programadores
Los datos serán el producto más valioso en los próximos años para identificar, entre otros, patrones de comportamiento de las personas, la sociedad y dar respuesta a necesidades o diseñar nuevos productos.
Según Oppenheimer, “quienes se dediquen a su exploración y análisis tendrán trabajo asegurado”.
3. Los policías digitales
Ya que la economía se traslada cada vez más al mundo digital, la empresas necesitarán personas que cuiden esa información de los ataques cibernéticos.
“Así como cualquier empresa tiene un policía en la puerta, cualquier negocio deberá tener un policía digital, o muchos, para que sus datos no sean robados por algún adolescente travieso, un grupo de ciberespionaje profesional ruso, los gobiernos de Corea del Norte o China”, destaca el escritor argentino de 66 años de edad.
4. Los asesores de ventas
Con el crecimiento de las clases medias, el consumo mundial aumentaría a más de 23 trillones de dólares en 2030, según el McKinsey Global Institute. Así las cosas, y a medida que las tiendas físicas paran al comercio electrónico, se necesitarán personas que brinden asesoría sobre cualidades y precios de los productos.
Dice Oppenheimer que los vendedores del futuro cercano “tendrán una mayor preparación académica” y , más que vender un producto, su función será educar a los consumidores. Esto creará relaciones de confianza para ganar la lealtad del cliente a largo plazo.
Además, señala que ” uno de sus principales requisitos laborales será saber sonreír y contagiar el buen humor, algo que los humanos seguirán haciendo mucho mejor que los robots”.
5. Los cuidadores y programadores de robots.
Debido al posible incremento en la venta de robots, el autor considera que éstos necesitarán “ingenieros para aceitarlos, hasta programadores para actualizar su software.
Entre los trabajos técnicos que más se desarrollarán en el futuro, estarán los de “los inspectores y mecánicos del internet de las cosas”,. Esto último hace referencia al sistema que está conectado entre sí, que permitirá por ejemplo que el cartón de la leche le avise a la nevera que nos estamos quedando sin esa bebida.
6. Los profesores y maestros:
Por el aumento en la automatización de empleos, considera Oppenheimer que se necesitarán profesores para educar a la gente en el manejo de los robots y las tareas más sofisticadas.
Por otro lado, y debido a la velocidad del desarrollo tecnológico, lo que se estudió en la universidad hace 10, 20 o 30 años ya será algo prehistórico en la mayoría de trabajos. Así que “tendremos que estudiar de por vida, en periodos intermitentes, para actualizarnos y reinventarnos según los requerimientos del mercado laboral”.
Además, los maestros serán muy importantes para enseñar a los niños a encontrar su vocación, así como para fomentar cualidades como la ética, la empatía, el trabajo en equipo, la persistencia y la tolerancia al fracaso.
7. Los especialistas en energías alternativas
Las consecuencias del cambio climático y una sociedad cada vez más consciente de que debe regular el consumo, serán el escenario ideal para especialistas en energías renovables.
El futuro cercano requerirá más inversión en energías como la solar y la eólica. “Se necesitarán cada vez más científicos especializados en energías renovables, y arquitectos e ingenieros encargados de montar plantas y hacer que las fábricas, los edificios y los vehículos sean más eficientes”.
8. Los artistas, deportistas y creadores de entretenimiento
Ya que la gente trabajará menos horas a la semana, tendrá por ende más tiempo para la demanda de cine, música, arte y literatura.
La automatización del mundo le abrirá un gran campo a las industrias creativas, según Oppenheimer.
9. Los creadores y diseñadores de contenido
A medida que aumenta el comercio en línea, los consumidores necesitarán tomar sus decisiones de acuerdo con lo que se ve en internet.
Por eso, tomarán valor los creadores de contenidos visuales, los escritores de blogs y artículos en redes sociales.
Según Oppenheimer, los sitios de internet de las empresas, deportivas y artistas profesionales, se convertirán en “verdaderos medios de comunicación”. “Eso hará que los portales de internet sean mucho más importantes (…) requerirán creadores de contenidos cada vez más talentosos”.
10. Los consejeros espirituales
La creciente soledad de la población, así como la desagregación de las familias, convertirá en necesidad a las personas que ayudan a orientar el sentido de la vida.
“Los sacerdotes, imanes y rabinos tendrán su trabajo asegurado durante mucho tiempo”, señala el autor de este libro.
Lo que sabemos y lo que está sucediendo
Las afirmaciones de Andrés Oppenheimer también son avaladas por el estudio de la Universidad de Oxford, The Future of Employment, en el que, después de analizar 702 profesiones en Estados Unidos, se concluyó que el 47% está en riesgo de desaparecer por los avances en la robótica.
Los países de la región latina pueden ser los más afectados con la automatización. Solo en Argentina, según el Banco Mundial, hay un riesgo de perder el 65% de los empleos.
Otros como Richard Susskind, gurú en tendencias sobre el futuro del empleo en el sector legal, considera que los humanos “han hecho demasiadas suposiciones acerca de lo indispensables que son”, ya que las computadoras están logrando cosas que se pensaba que solo el hombre podía hacer: como componer música original o superar a jugadores profesionales de ajedrez.
Para Oppenheimer, ya en esta época los robots son más baratos que los trabajadores humanos, por lo que las empresas y gobiernos están optando en cambiar su fuerza laboral por esto. “Los robots trabajan tres turnos seguidos, no piden incremento salarial, ni se toman vacaciones”, dice.
En japón, ya hay hoteles donde sus trabajadores son robots, incluso los recepcionistas.
Seguramente, así como en la década del 2000 se vivió un movimiento “anti-globalización”, en las próximas décadas los humanos defenderán sus profesiones con movimientos “anti-robotización”.
Y usted, ¿cree que está listo para afrontar un mundo en el mande la inteligencia artificial?
Tomado de: https://canal1.com.co/entretenimiento/ideas-utiles/los-10-trabajos-que-sobreviviran-cuando-las-maquinas-reemplacen-a-los-humanos/
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